miércoles, 9 de octubre de 2019

MARIA VARILLA Y EL FESTIVAL DE BANDAS PORRO FANDANGO Y CHANGUAR


La conformación de la Banda de Vientos de la Casa de la Cultura de Silvia Cauca, en el año 2006, reunió a más de 15 personas entre jóvenes y niños, quienes bajo la dirección del Maestro Deiber Sanín Fernández, instituyeron la banda que hoy en día es muy reconocida en el municipio, por sus impecables y variadas presentaciones en los eventos culturales del pueblo y sus alrededores.

En el transcurrir del tiempo, sus integrantes se inclinaban mucho por la música fiestera, interpretaciones que salían a relucir y ponían a bailar a los espectadores en actividades como las Vacalokas, retretas, desfiles y demás.
Por eso hicieron una solicitud en 2014, para que esta Banda fuera invitada al
“Festival de Porro” en San Pelayo, Córdoba; esta experiencia fue la clave para que ellos se reafirmaran en la interpretación de este tipo de música. Una vez el Maestro Sanín se retiró de la dirección de la banda, sus integrantes decidieron crear una banda que se enfocará en la música fiestera, en el porro, la cumbia y la música colombiana.
En Julio de 2017 se convertirían en  MARIA VARILLA, nombre que surgió de la experiencia en San Pelayo, debido a un Porro creado en honor a una señora de esta tierra de apellido Barilla, ya que ella podía pasar hasta tres días bailando en el festival, erguida como una varilla, por eso este nombre.

Una de las primeras presentaciones como grupo ya constituido formalmente, fue en el Concurso de Bandas Fiesteras Victor Luis Fernández, que se realiza en el mes de agosto en la plaza principal de Usenda. Aquí hacen su debut y de ahí en adelante, la comunidad empieza a reconocerlos como la banda fiestera de Silvia Cauca, participando de los principales eventos del municipio como Festidanzas, danza al parque, fiestas patronales y demás.   
Debido a la gran acogida y con la idea de dar un aire diferente a los festivales que se realizan en Silvia, Cauca, decidieron crear el “FESTIVAL DEPARTAMENTAL DE BANDAS FIESTERAS PORRO FANDANGO Y CHANGUAR”, donde en su primera versión bandas fiesteras de diferentes municipios del Cauca, participaron en una jornada que estuvo apoyada por el colectivo Vacalok y diferentes personas del pueblo, quienes buscan el fortalecimiento cultural del mismo.

Así pues, día sábado 12 y domingo 13 de octubre se llevará a cabo la 2da versión de este Festival Fiestero, que contará con el apoyo de la casa de la cultura y por entidades del municipio, lleva como lema “AL CAUCA CON PASOS DE COLORES”, ya que participarán bandas y grupos de danzas de diferentes regiones del Departamento buscando que este y Silvia como municipio sean catalogados como uno de los mejores festivales musicales de la región. 

Escrito por:
Clara Isabel Rengifo Reyes
Comunicadora Social y Periodista

Fuente:
Paula Vidal Godoy

miércoles, 22 de mayo de 2019

La violencia como forma de educación emocional contemporánea




Cuando se forjó el sueño emancipador basado en la razón y en el avance técnico se esperaba que dicha combinación cumpliera la promesa de llevar a las sociedades a su nivel máximo de complejidad. Creo que ese sueño como muchos fue inocente, se perdió en las bondades y dejó a un lado las contradicciones y la pluralidad de usos sociales que se le podría dar.

Resulta doloroso como en la actualidad esa concepción racional y técnica del mundo ha conseguido desplazar o al menos aislar la condición humana del hombre en pro de la satisfacción irracional de su deseo. Bastaría con escuchar una noticia, ver un post o una denuncia en redes sociales para desear mantenerse al margen de las acciones depredadoras del ser humano contra todo lo que le rodea.

Lamentablemente la información parece convertirse, por su frialdad y ejercicio naturalizador en una especie de escuela emocional que, en lugar de invitarnos a ser mejores, nos convoca a emular las acciones desafortunadas que presenciamos. Ello en razón a que descargar de sentido las palabrasracionalizar el lenguaje y tratar de mantener la objetividad ante hechos de abuso y destrucción contribuyen a ello.

Tras la palabra feminicidio en uso de los medios de comunicación cuyo significado denota un crimen de odio y alude al asesinato de una mujer por el simple hecho de serlo, se esconden concepciones racionalizadastecnificadas de violencia que pasan por instancias diversas a las del odio por el odio y con esos usos sociales se contribuye a invisibilizar problemas sociales de mayor envergadura, a mi parecer, que rastrear simplemente un sentimiento de odio.

El reciente caso de la adolescente Juliana Chirimuscay, que remite casi de inmediato al ocurrido hace algunos años con la niña Yuliana Samboni, traen al presente una serie de rasgos deshumanizantes y violentos que llevan a denotar sentimientos de crueldad más allá del odio al simple hecho de ser mujeres, parece que socialmente estuviéramos padeciendo una enfermedad de ansia de control y dominio sobre lo que nos resulta más débil. 

El problema no debería ser si la adolescente estaba en una fiesta, si se pasó de la hora de entrada o si por un desafortunado incidente confió en amigos o en extraños, el asunto es que cada ser vivo en condiciones de indefensión no debería generar para ningún otro ser racional y humano un blanco para satisfacer el deseo vinculado a la crueldad.

De ahí se deduce que la lucha por el respeto a la vida y la dignidad es un problema que trasciende los límites del género y abarca la relación general del ser humano con la naturaleza en condiciones de respeto, reconocimiento y dignidad.

Mi pregunta simple es hasta dónde todo aquello que consumimos continuamente disfrazado de políticamente correcto es lo que forma en nosotros como seres humanos esa necesidad desmesurada de ejercer control hasta la muerte a todo aquello que nos resulta indefenso.


Andrea Calderón Villarreal
Profesora
Programa de Comunicación Social 
Universidad del Cauca

jueves, 9 de mayo de 2019

Tres de Mayo, el día de la Santa Cruz

Como es costumbre, el tres de mayo de cada año se celebra la invención de la Cruz, con el fin de conmemorar a la verdadera cruz donde murió Jesús. Se realiza en esta fecha, debido al descubrimiento de la misma, por parte de Santa Helena, quien halló la Vera Cruz en una peregrinación a Jerusalén en el año 326.

En algunos pueblos y ciudades del mundo, esta festividad aún sigue viva, así como en Silvia, Cauca.
Durante la noche del tres (3) de Mayo, algunas familias del pueblo, desde muy temprano organizan altares afuera de sus casas, donde adornan con flores, tejidos, telas, luces y velas, la Santa Cruz. Cruces hechas en diferentes materiales como la madera, el hierro o la guadua.

Así pues, los silvianos durante esta noche, recorren las diferentes calles donde se exponen las cruces, durante el cual, se hace una pequeña oración y se nombra a Jesús 1.000 veces. Muchas de estas personas, hacen peticiones, promesas y demás con el fin de recibir bendiciones a las necesidades y angustias de ellos y sus familias.
La imaginación y la fe de aquellas personas que aún realizan estos pulcros altares, son quienes permiten que esta tradición que ya hace parte de la identidad cultural de Silvia, siga viva y no se quede en el olvido.

A continuación, podremos observar algunas de las 30 cruces que engalanaron el pueblo este tres de mayo.


















domingo, 28 de abril de 2019

EL PERDURAR DE LA TRADICIÓN EN LA SILVIANIDAD


El intenso frío que emerge sobre un valle alto en la cordillera central de Colombia, no es impedimento para disfrutar de la paz que regala la naturaleza del pueblo; los bellos paisajes silvianos han sido inspiración para varios artistas, aquel atardecer rojizo que toca sentidos en quien le aprecia, es la más hermosa expresión del pasar de la vida silviana, al igual que la lluvia, que hidrata la tierra de donde sale la papa, el ulluco, la yuca y la arracacha, donde se siembran las hortalizas para el sancocho, las ensaladas y gran variedad de platillos típicos de Silvia.

Los eventos y festividades son espacios que unen a los silvianos como una sola familia; la Semana Santa es uno de ellos. Con la llegada del miércoles de ceniza, la emoción por esta época tan esperada se hace cada vez más fuerte. Se escuchan a lo lejos los tambores en ensayos, y el olor a madera por la armada de los pasos, que a su vez comienza a recorrer el ambiente.
Cuentan algunos profesores que los niños al salir de las escuelas, corren a la iglesia para ver los santos, siendo este el inicio anual de una costumbre heredada por los viejos y que se mantiene viva en los más pequeños.

Esta tradición inicia cada año en un viernes denominado Viernes de Dolores, donde el incienso en las calles da anuncio al inicio oficial de esta época tan esperada en el año.  Enseguida llega el Domingo de Ramos y los días santos, acompañados por el fervor y la adoración de los habitantes, los cuales se toman el pueblo para conmemorar la pasión, muerte y resurrección de Jesús. 

Los recorridos procesionales son la muestra más visible de la disposición de los creyentes para hacer parte de una de las costumbres más importantes del pueblo; todos juntos en el parque como alumbrantes y  espectadores, sin alejarse, hasta el momento en que la virgen Dolorosa no se encuentre dentro de la iglesia y la última canción marcial no cese.

La cálida pasión de los silvianos por el pueblo, radica en las tradiciones y expresiones culturales. Silvia, siempre está a la espera con un fraternal saludo para quien pasa por sus lares, donde la multiculturalidad es la puntada principal de este paraíso con nombre de mujer, un lugar con folclor, tradición y mucha cultura para mostrar.


Por:
Darío Fernando Fernández Álvarez